Cuidar tu piel es un verdadero arte y una ciencia que todos podemos dominar. El secreto para un cuidado efectivo está en comprenderla a fondo, ya que conocerla te permitirá encontrar los productos que mejor funcionen para ti y abordar cualquier problema sin empeorarlo.
En este blog:
A menudo, nos obsesionamos con tener una piel perfecta sin tener en cuenta que cada persona tiene una genética y un estilo de vida diferentes. Por lo tanto, el camino hacia una apariencia de porcelana será diferente para cada uno de nosotros.
Es básico e importante que seas consciente de que existen 4 tipos de piel: grasa, seca, mixta y normal. Conocer cuál es tu tipo de piel y reconocer las diferencias que tienes con la de tu amiga, la vecina y la de tu compañera de oficina, te va a liberar de comparaciones que no te dejan nada, pues cada una tiene diferentes vidas y cuerpos.
Por ejemplo: ¿Cuántas veces pensaste que la falta de higiene es la causante del sebo en tu rostro?
Esta idea equivocada --como otras más que solo desinforman sobre los tipos de piel-- podría estar agravando la condición grasa en tu piel. Tal vez lavas en exceso tu cara y, por ello, la resequedad estimula la producción de sebo para compensarla.
Pero para liberarte de dudas, en Bellísima vamos a ayudarte a identificar tu tipo de piel. Sigue leyendo porque te contaremos acerca de las CARACTERÍSTICAS de cada tipo de rostro para que puedas reconocerlas y darle los mejores cuidados al órgano más grande de nuestro cuerpo.
La piel grasa es uno de los tipos de piel más comunes y a menudo malentendidos, ya que puede creerse que se debe a una falta de higiene, cuando en realidad se produce como resultado de un exceso de producción de grasa por las glándulas sebáceas.
Este tipo de piel es frecuente en jóvenes y adolescentes menores de 30 años, y a menudo se relaciona con la presencia de acné. La genética y las hormonas suelen ser los principales factores determinantes en la aparición de este tipo de piel.
Una piel grasa presenta las siguientes características y nos lleva a algunas de estas situaciones:
Las cremas hidratantes libres de aceite serán tus mejores aliadas para mantener tu piel grasa bajo control. Además, los exfoliantes químicos y las máscaras de arcilla te serán excelentes para controlar los brotes y reducir el exceso de sebo. Sin embargo, recuerda no lavar tu cara en exceso, ya que esto puede llevar a que tus poros produzcan más aceite para compensar.
TIP:
Para evitar que la temida suciedad se acumule en tu piel es importante que exfolies, de manera periódica, de 1 a 2 veces por semana.
Te recomendamos el uso de la Mascarilla Desintoxicante de Arcilla Rosa de Revolution Skincare que contiene extracto de algas y hamamelis para ayudar a extraer las impurezas y absorbe la grasa para fomentar un cutis de aspecto más saludable.
También te puede interesar:
<< Skincare Piel Grasa: Rutina para esta Piel >>
¿Te sientes como un pez por lo escamosa que se ve tu piel casi siempre? ¿Tienes la sensación de un rostro tenso y áspero al contacto con tus dedos? Quizá estos sean signos de una piel seca.
La piel seca es una condición en la que ésta retiene menos humedad y, a diferencia de una piel grasa, casi no produce grasa. La descamación en estos casos es evidente.
Aunque la piel seca es muy común entre las personas, en ocasiones, puede ser un síntoma de una problemática mayor de salud como dermatitis atópica, hipotiroidimos o psoriasis, entre otras condiciones.
Para identificar una piel seca presta atención a los siguientes signos:
La piel seca es notoria por su baja producción de grasa, lo cual puede hacer que la tez luzca apagada, escamosa e incluso puede presentar signos de edad más tempranos. Para tratar este tipo de piel es importante enfocarse en proveerle hidratación.
Para esto debemos sellar la humedad aplicando una crema hidratante enriquecida varias veces al día, especialmente después de lavarse las manos o bañarse.
TIP:
El ácido hialurónico es un componente hidratante que puede ayudarte con esta tarea, por eso te recomendamos el Hidratante para el Rostro con Ácido Hialurónico de Mario Badescu.
Ayuda a la piel a retener la humedad durante todo el día para una hidratación duradera y para reducir la apariencia de los efectos visibles de la deshidratación de la piel, incluidas las líneas finas.
También te puede interesar:
<< Skincare Piel Seca: Rutina para esta Piel >>
Si con toda esta información que has leído sobre piel grasa y piel seca, no estás totalmente segura de cuál es tu tipo de piel o te identificas con las características de una y la otra, tal vez tienes una condición de piel mixta.
¿Piel mixta? ¡Sí!
La piel mixta se caracteriza por tener ciertas zonas del rostro con piel seca, es decir, con enrojecimiento y descamación; mientras que en otras áreas puede lucir muy brillante y tener brotes de granitos al padecer piel grasa.
Las partes más grasas de la piel mixta se deben a una hiperproducción de sebo. Las partes más secas de la piel mixta se deben a una falta de sebo y al correspondiente déficit de lípidos.
Normalmente la sensación grasienta y el exceso de sebo se presenta en la zona T, mientras que el resto del rostro la piel seca es evidente.
También te puede interesar:
<< Skincare Piel Mixta: Rutina para esta Piel >>
La piel seca tiene las siguientes características:
El secreto para manejar una piel mixta está en encontrar el equilibrio perfecto. Aísla las zonas problemáticas con productos especializados y utiliza tónicos o cremas que equilibren la piel. El objetivo es lograr un equilibrio perfecto entre las áreas grasas y las áreas secas de tu rostro.
TIP:
Te recomendamos el Skin Booster Suero de Physicians Formula con ácido hialurónico y aloe vera. Su dosis diaria estimula la piel y la prepara para un brillo hidratado. ¡La tecnología encapsulada en hidrogel ofrece resultados efectivos para abordar todas las necesidades de tu piel!
Tienes casi lo que se dice una piel de porcelana como la que describimos al principio de este blog. Sin embargo, es importante decirte: ¡no te confíes, amiga!
Los factores ambientales como el clima, tomar ciertos medicamentos, desarrollar enfermedades, nuestros hábitos alimenticios o la higiene de sueño pueden cambiar la condición de la piel.
Así es básico que sigas cuidados para mantenerla tal y como la ves ahora.
Algunas de las características que presenta la piel normal son las que te mostramos a continuación:
La piel normal es una piel equilibrada y que casi no experimenta sequedad, enrojecimiento o sensibilidad, esto hace que lo importante sea cuidarla desde la prevención.
Por suerte esta piel es apta para la gran mayoría de productos; puedes probar con geles de limpieza purificantes, cremas hidratantes y protectores solares.
TIP:
Un infalible en cualquier rutina de skincare es el limpiador. Para que tu piel quede limpia, suave y sin residuos visibles te recomendamos el Gel Facial Limpiador con Agua de Rosas de Nivea.
Sus micelas funcionan como un imán que atrapa efectivamente el maquillaje, suciedad e impurezas para dejar la piel renovada y fresca.
Conocer el tipo de piel que tienes es importante para que puedas mantenerla saludable y con una apariencia fresca. Recuerda que todos tenemos diferentes historiales clínicos, distintos estilos de vida y estamos expuestos a diferentes factores en el ambiente que pueden agravar o cambiar la condición de nuestra piel.
¿Ya tienes tu rutina de skincare de acuerdo a tu tipo de piel? Síguenos en Insta y descubre más tips para complementarla y aprovechar al máximo esos minutos de selfcare que te regalas al día, nos encuentras como @bellisimamx.